La apariencia de los edificios funerarios antiguos tibetanos está estrechamente relacionada con la transformación de la cultura funeraria antigua tibetana. Según la literatura, el sistema de entierro no se practicaba antes del período legendario del rey tibetano gri-gum-btsan-po, por lo que no se construyeron mausoleos. A partir de la época de gri-gum-btsan-po, el sistema funerario cambió y se implementó el entierro. Además, las fuentes escritas mencionan la construcción de mausoleos, lo que revela el arte arquitectónico de estos edificios. Hasta el último rey, Langdarma, de la dinastía Tubo (siglo IX d.C.), cada rey de las dinastías Tubo construyó mausoleos y edificios especiales para los difuntos sobre las tumbas.